El camino más difícil al Título de la NBA
No hay mejor posible final que acabar una temporada levantando el trofeo Larry O’Brien entre confeti dorado y luces que deslumbrantes iluminando al nuevo rey del baloncesto mundial. Sin lugar a duda, todos los equipos de la NBA firmarían al principio de la temporada vivir ese final pero tan sólo uno pude hacerlo. El camino a ese final soñado no es sencillo para ninguno de los campeones que ha tenido la NBA, pero para uno de ellos lo fue aún más.. fue el camino más difícil al Título de la NBA.
La exigencia de ser Campeón conlleva en la actualidad un formato de cuatro rondas al mejor de 7 partidos.
Prevalecer en cada una de esas rondas llegando primero a ganar 4 partidos, es el formato más largo que ha tenido la liga en su historia.
En otros formatos anteriores debido al número de equipos que también tenía la liga, ha habido menos rondas y también menos partidos en esas rondas, como por ejemplo hacer las series al mejor de 3 partidos, al de 5 o como en la actualidad a 7.
Con estos antecedentes encontramos al equipo que más le costó ser Campeón de la NBA en un pasado bastante reciente.
Los Boston Celtics son el equipo que tuvieron un camino más difícil al Título de la NBA ya que tuvieron que disputar 26 partidos para ser Campeones en la temporada 2007-2008.
En aquella temporada en la que el Big Three de los Celtics formado por Ray Allen, Kevin garnett y Paul Pierce devolvieron el éxito al estado de Massachussetts, el conjunto verde tuvo que superar las cuatro rondas llegando dos veces al séptimo partido y las otras dos al sexto.
Superaron por 4 a 3 a los Hawks y Cavaliers y por 4 a 2 a los Pistons y Lakers, ya en las Finales de la NBA.
En total tuvieron que disputar 26 de los 28 partidos máximos posibles.
De aquellos Playoffs casi eternos para los Boston Celtics, también se generó otro record compartido por hasta 5 jugadores de aquel equipo.
Ray Allen, Kevin Garnett, Paul Pierce, Rajon Rondo y James Posey pasaron a ser los jugadores que más partidos han jugado en la historia en unos sólo playoffs con 26 partidos.
El esfuerzo valió la pena para un equipo que hizo historia de la NBA.
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